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Estudios genéticos

Una prueba genética o un estudio genético es un test realizado en el laboratorio para analizar los genes. Los genes son las instrucciones contenidas en el ADN que heredamos de nuestros padres. En ocasiones estas instrucciones contienen variantes o defectos conocidos como mutaciones que pueden predisponer, ser la causa o una de las causas de problemas de salud y diversas enfermedades.

Los resultados obtenidos en un test genético pueden ser útiles para la prevención, el diagnóstico y el pronóstico de una enfermedad:

Prevención: Ayuda a identificar cambios que predisponen a determinadas enfermedades.

Diagnóstico y pronóstico: Una patología puede cursar de forma diferente según la mutación (total o parcialmente) causante.

Contribuye a determinar el diagnóstico y pronóstico de la enfermedad.

Tratamiento y terapia: Puede determinar el tratamiento más eficaz a seguir.

Estudio familiar y heredabilidad: Una prueba genética determina el riesgo de que tus familiares padezcan la enfermedad o sean portadores.

Servicios que ofrecemos

Realizar una detección temprana: Se inicia con un examen físico completo y profundo, así como un análisis del historial médico, familiar y personal. Adicionalmente, se realizan estudios de laboratorio de sangre, orina y heces; que pueden ofrecer información adicional sobre parámetros del cuerpo que pudieran indicar la presencia de cáncer.
Evaluar resultados anormales: Se solicitan estudios de imagen, como radiografías, tomografías o ultrasonidos, de ser necesario se realiza una biopsia y pruebas para determinar si las células encontradas son cancerosas.
Estratificar el cáncer: A partir de todos los análisis y estudios realizados se confirma la presencia del cáncer, se procede a su estratificación, es decir, a determinar en qué etapa se encuentra y se hace un registro del mismo.
Tratamiento del cáncer: Dependiendo de la situación específica de cada paciente se pueden utilizar diferentes opciones, como cirugía, radioterapia, quimioterapia, terapia hormonal e inmunoterapia.
Vigilancia post-tratamiento y recurrencia: Seguimiento al tratamiento y estudios recurrentes para confirmar la ausencia de células cancerosas.
Cuidados paliativos: Apoyo al paciente para mejorar su calidad de vida y contribuir en la disminución del dolor.
Apoyo nutricional.
Apoyo psicológico.

Atención a cada paciente, por un equipo multidisciplinario de especialistas, que analizan y consensan las mejores opciones de tratamiento para cada caso.
Un área de laboratorio e imagen que cuenta con resonancia magnética, tomografía, mamografía, ecosonografía, rayos X convencionales y portátiles, entre otros.
Apoyo del banco de sangre, para transfusiones sanguíneas que requieran los pacientes.
Servicios de histopatología, para el análisis de tejidos retirados en cirugía que permitan un diagnóstico certero.
Áreas quirúrgicas, especialmente acondicionadas para la práctica de cualquier tipo de cirugía que el paciente requiera.
Terapia hormonal, para el tratamiento de algunos tipos de cáncer.

Inmunoterapia, para contribuir a estimular las defensas naturales del cuerpo que le permitan luchar contra la enfermedad.
Acceso a tecnologías de vanguardia, únicas en el occidente del país para el tratamiento del cáncer.
Radioterapia con Acelerador Lineal, que garantiza la seguridad del paciente a través de una mayor precisión, por lo que disminuye los riesgos de daño a órganos vecinos.
Quimioterapia, aplicada en cubículos independientes, bajo la supervisión de personal altamente calificado y con el respaldo de toda la infraestructura que Hospital San Javier ofrece.
Radiocirugía cerebral sin bisturí, a través de la Unidad Gamma Knife Perfexion, que permite tratar tumoraciones en una sóla sesión, disminuyendo riesgos y reincorporando al paciente a su calidad de vida, previa al tratamiento, de manera inmediata.